martes, 22 de julio de 2008

Biografia de Delise

La historia de Delisse es una buena síntesis de las dificultades del trabajo musical independiente, vinculado en su caso al intento por desarrollar en Chile un pop de claras pretensiones masivas. Largas pausas separan sus publicaciones discográficas, las que desarrollan baladas de fuerza rockera derivada de su afición por la música estaounidense contemporánea. Delisse tiene en su condición de dúo una de sus principales marcas de identidad.

Genes musicales
El interés de la cantante Magdalena Atria por la música es una lógica herencia familiar. La joven es hija del matrimonio de Jaime Atria y Gloria Spoerer; el primero fundamental compositor de tonadas (es suya “La consentida”) y la segunda, una cantante que llegó a grabar en varios discos de jazz.

Su encuentro con Cristián Moya en 1995 (ambos eran compañeros de Comunicación Audiovisual) determinó el inicio de una colaboración conjunta que desde un principio ha mantenido a Moya como compositor de la música y a Atria como letrista y vocalista de canciones casi siempre vinculadas a los vaivenes de las relaciones amorosas. El guitarrista creció con los códigos del llamado hair-metal de los años ’80 (Skid Row, Bon Jovi, Motley Crue), y su trabajo para Delisse busca esa misma combinación de fuerza melódica, de aparente rudeza pero fondo amable.

Pese a dos compañeros que colaboraron brevemente con ellos, Delisse ha sido desde sus inicios un dúo. En su biografía oficial el grupo detalla los sucesivos esfuerzos por debutar discográficamente, “las innumerables puertas que tocarían sin ser acogidos, las muchas veces que escucharían un ‘no’ por respuesta, las miles de promesas sin cumplir”. Así y todo, en el 2001 el grupo estableció los contactos necesarios para integrarse al catálogo del entonces naciente sello Azul, por el cual publicaron su primer álbum, Gritarlo el cielo, destacado por el single “Un rincón escondido”.

Cinco años pasaron antes de un trabajo sucesor. La producción de El peso del dolor (un tema homónimo surgió luego de la muerte de la madre de Magdalena, y con versos como “es tan fuerte el peso del dolor / que ha aplastado todo lo que soy / se me van las fuerzas lejos / ¿quien entiende lo que siento?) quedó a cargo de la experimentada dupla de los músicos Cristián Heyne y Daniel Guerrero (con encargos previos para Luis Jara, Pali y algunas bandas sonoras). Sin embargo, fue puesta a la venta primero sólo en formato digital (temas y ringtones, en un experimento que comienza a masificarse en Chile pese a que sus resultados son aún inciertos. Para su presentación, el grupo trabajó cuidadosamente un cambio de imagen, llamativo en ambos casos por los contrastes con sus antiguas fotos. Según Delisse, “lo visual es súper importante para nosotros, y somos ‘quisquillosos’ tanto en nuestra imagen como en nuestros espectáculos en vivo”.


Gritarlo al cielo (2002 - Sello Azul)
El peso del dolor (2006 - Edición independiente)


BIOGRAFIA
La historia de Delisse es una buena síntesis de las dificultades del trabajo musical independiente, vinculado en su caso al intento por desarrollar en Chile un pop de claras pretensiones masivas. Largas pausas separan sus publicaciones discográficas, las que desarrollan baladas de fuerza rockera derivada de su afición por la música estaounidense contemporánea. Delisse tiene en su condición de dúo una de sus principales marcas de identidad.

Genes musicales
El interés de la cantante Magdalena Atria por la música es una lógica herencia familiar. La joven es hija del matrimonio de Jaime Atria y Gloria Spoerer; el primero fundamental compositor de tonadas (es suya “La consentida”) y la segunda, una cantante que llegó a grabar en varios discos de jazz.

Su encuentro con Cristián Moya en 1995 (ambos eran compañeros de Comunicación Audiovisual) determinó el inicio de una colaboración conjunta que desde un principio ha mantenido a Moya como compositor de la música y a Atria como letrista y vocalista de canciones casi siempre vinculadas a los vaivenes de las relaciones amorosas. El guitarristcreció con los códigos del llamado hair-metal de los años ’80 (Skid Row, Bon Jovi, Motley Crue), y su trabajo para Delisse busca esa misma combinación de fuerza melódica, de aparente rudeza pero fondo amable.

Pese a dos compañeros que colaboraron brevemente con ellos, Delisse ha sido desde sus inicios un dúo. En su biografía oficial el grupo detalla los sucesivos esfuerzos por debutar discográficamente, “las innumerables puertas que tocarían sin ser acogidos, las muchas veces que escucharían un ‘no’ por respuesta, las miles de promesas sin cumplir”. Así y todo, en el 2001 el grupo estableció los contactos necesarios para integrarse al catálogo del entonces naciente sello Azul, por el cual publicaron su primer álbum, Gritarlo el cielo, destacado por el single “Un rincón escondido”.

Cinco años pasaron antes de un trabajo sucesor. La producción de El peso del dolor (un tema homónimo surgió luego de la muerte de la madre de Magdalena, y con versos como “es tan fuerte el peso del dolor / que ha aplastado todo lo que soy / se me van las fuerzas lejos / ¿quien entiende lo que siento?) quedó a cargo de la experimentada dupla de los músicos Cristián Heyne y Daniel Guerrero (con encargos previos para Luis Jara, Pali y algunas bandas sonoras). Sin embargo, fue puesta a la venta primero sólo en formato digital (temas y ringtones, en un experimento que comienza a masificarse en Chile pese a que sus resultados son aún inciertos. Para su presentación, el grupo trabajó cuidadosamente un cambio de imagen, llamativo en ambos casos por los contrastes con sus antiguas fotos. Según Delisse, “lo visual es súper importante para nosotros, y somos ‘quisquillosos’ tanto en nuestra imagen como en nuestros espectáculos en vivo”.




Gritarlo al cielo (2002 - Sello Azul)
El peso del dolor (2006 - Edición independiente)